
“Los Cuidados Paliativos constituyen un planteamiento que mejora la calidad de vida de los pacientes (adultos y niños) y sus allegados cuando afrontan problemas inherentes a una enfermedad potencialmente mortal. Previenen y alivian el sufrimiento a través de la identificación temprana, la evaluación y el tratamiento correctos del dolor y otros problemas, sean estos de orden físico, psicosocial o espiritual”.
OMS- Agosto- 2020
Cuidados silenciosos
Narrado por Lic. Violeta c. espeche
CUIDADOS PALIATIVOS EN RÍO GRANDE, TIERRA DEL FUEGO
Los Cuidados Paliativos del Hospital Regional Río Grande, Nuestra Señora de la Candelaria (por ese entonces), dan inicio en el año 1998, a cargo de los Dres. Eduardo Medina y Luis Quevedo, quienes luego de concurrir al 2do Curso Avanzado en Cuidados Paliativos en la ciudad de Río Gallegos, Santa Cruz; inician la actividad de cuidados a pacientes que se encuentran internados en la institución. Por problemas de salud el Dr. Medina abandona la actividad médica, quedando el Dr. Quevedo Luis Ernesto; en ese año la Enf. María Rosa Martínez se integra al equipo.
A fines del mismo año el Dr. Quevedo Luis E. dicta el 1° Curso Básico de Cuidados Paliativos para el personal médico y de enfermería, con el objetivo de ampliar el equipo de cuidados.
A inicios del año 2000 me incorporo al equipo, en ese momento se ha iniciado el cuidado de pacientes internados en el hospital, también se brindaba asistencia a los pacientes y sus familias en el mismo domicilio/residencia.
También se dicta el 2° Curso de Cuidados Paliativos en el hospital, abierto no sólo al personal del nosocomio sino para toda la comunidad asistencial de la ciudad.
En el año 2006 se incorpora la Dra. Sara Bisquert y el Enf. Lisandro Esteban Coñuecar, luego de realizarse el 3° Curso de Cuidados Paliativos, que se dictara en instalaciones del Cent N° 35.
En el transcurso del año 2007 la labor de nuestra Unidad sufre la baja de la Enf. Martínez, María Rosa quien deja la actividad por motivos personales. Ese mismo año la Dra. Bisquert y yo logramos concretar la finalización del posgrado en Cuidados Paliativos, dictado por el Instituto Pallium y certificado por la Escuela de Medicina de Postgrado de la Universidad del Salvador.
En Setiembre de 2008, el trabajo de cuidado integral y de contención del paciente y familia por parte del equipo es reconocido como Unidad de Cuidados Paliativos, formando parte del Organigrama Hospitalario.
La Unidad de Cuidados Paliativos (UCP), pionera en la actividad de la provincia representa ser el resultado de un grupo de profesionales médicos y enfermeros del Hospital Regional Río Grande “Nuestra Señora de la Candelaria”, que con escasos recursos brindan una opción diferente a pacientes en situación de patología incurable y amenazante para la vida y a sus familiares, con apoyo y contención. Su labor es mediante internación domiciliaria y soporte hospitalario.
Nuestro medio de comunicación con los pacientes y sus familias era atreves de un teléfono móvil que estaba en funcionamiento y se atendía sin demora, las 24 horas del día y los 365 días del año … nada detuvo nuestro compromiso de responsabilidad de cuidar a la comunidad que requería nuestra atención inmediata.
A partir del año 2010 logramos contar con dos consultorios que permitían realizar consultas, reuniones familiares, plan de cuidado, curaciones, asesoramiento y contención a pacientes y sus familiares, particularmente el seguimiento del duelo. También el Ministerio de Salud dispuso de un móvil con chofer para desplazar al equipo de Cuidados Paliativos a los domicilios de los pacientes, pero sólo las visitas programadas ya que las situaciones de urgencias o extraordinarias las asistíamos con nuestros propios vehículos particulares.
Nos ocupábamos del control clínico del paciente, el cuidado holístico, también realizábamos trámites sociales, solicitudes de insumos médicos a las obras sociales, acompañamiento y soporte social en caso de familias con escasos recursos económicos, y es digno de mencionar que la Municipalidad de la ciudad, con sus distintos Intendentes se hicieron eco de la ayuda solicitada.
En esa época la actividad se limita casi exclusivamente a pacientes adultos debido a que los pacientes pediátricos eran derivados a centros de mayor complejidad al momento de la detección de patología susceptible de Cuidado Paliativo Pediátrico, igualmente por distintas circunstancias se brindó cuidados y acompañamiento a 3 (tres) pacientes y sus familias, durante la actividad de la Unidad de Cuidados Paliativos.
El trabajo realizado significó el puntapié inicial para el nacimiento de la Unidad de Cuidados Paliativos en el Hospital Regional de Ushuaia que continua su labor hasta la actualidad, con equipo multidisciplinario, con quienes en distintas oportunidades realizamos jornadas de actualización.
A inicios de enero 2013 el Enf. Coñuecar “nos deja” porque fue seleccionado en una convocatoria nacional para una beca de formación en Recursos Humanos en Cuidados Paliativos, por el Instituto Nacional del Cáncer.
La actividad del servicio en el Hospital de Río Grande quedó suspendida a raíz de la partida de ambos profesionales médicos, jubilación del Dr. Luis Quevedo y mudanza de la Dra. Sara Bisquert, en 2014.
Desde hace unos años, se ha incorporado al plantel médico permanente una médica paliativista pediátrica, por lo cual y ante la presencia de pacientes niños y adolescentes, tributarios de Cuidados Paliativos Pediátricos fue intención reactivar la unidad paliativa en el Hospital en Río Grande, para lo cual era fundamental contar con un grupo de profesionales adecuadamente capacitados, por lo que se iniciaron actividades tendientes a la captación del personal con interés y perfil paliativo, sin lograr el objetivo.
Es importante mencionar que durante el mandato provincial de la Gobernadora Sra. Bertone, Rosana se intentó reactivar la Unidad de Cuidados Paliativos, pero no se logró concretar por falta de médico. Actualmente no se brindan cuidados paliativos desde nuestro hospital en Río Grande, pero ha quedado en el camino, semillas que espero den frutos, dos Licenciados en Enfermería con posgrados en Cuidados Paliativos que sólo aguardan la reapertura de la Unidad.
Con profunda tristeza debo mencionar que no existen estadísticas hospitalarias ni registros fotográficos de la actividad que realizamos durante 16 años en la Unidad de Cuidados Paliativos, ni la carpeta con recortes de diarios y periódicos que mencionaban el agradecimiento de las familias a quienes acompañamos y cuidamos.
Nada quedó solo números aproximados que nos acercan a más de 890 familias y lo más gratificante es el encuentro con algunos de ellos, en las calles o comercios de la ciudad que nos agradecen y nos demuestran su afecto sincero, con un cálido abrazo.
Esta es la reseña de los Cuidados Paliativos que hicieron de mi profesión una labor maravillosa. Las personas a quienes pudimos cuidar y acompañar nos dejaron huellas imborrables en el corazón, en la memoria y nos forjaron ser los profesionales que hoy somos.
A poco tiempo de adherirme al régimen jubilatorio deseo que las políticas sanitarias de nuestra provincia den la prioridad que amerita brindar Cuidados Paliativos a la población de esta querida ciudad.
Agradecimiento: al Dr. Luis Ernesto Quevedo, mi mentor, mi más grande admiración!!! Lic. Violeta C. Espeche